viernes, 1 de marzo de 2019

Rol semanal: La player

Hola mis soñadores. Otra semana más que cambio de rol y esta vez me ha tocado desempeñar el rol de Player. Mi función se basa en jugar a un juego, entender su mecánica y funcionamiento.

He decidido jugar a "Contra viento y marea”, ya que tiene como objetivo marcado el conocimiento y comprensión de la realidad que viven las personas refugiadas, que se deben enfrentar a la huida de su país de origen  causada por la opresión a la que están sometidos y a las dificultades con las que se encuentran en el país de asilo.




Quería comprobar mediante una simulación a través del juego como se sienten las personas refugiadas viviendo este tipo de situaciones, meterme en su piel y en cierta manera sentir lo que ellos sufren al enfrentarse a esta triste realidad.

Os voy a desarrollar una serie de cuestiones para hacer una reflexión sobre el juego y su desarrollo. En primer lugar, voy a explicar en qué consiste el juego y a qué situaciones me he tenido que enfrentar a medida que avanzaba en el transcurso del juego. Había varias fases en las que jugar y en cada una de ellas varias posturas a las que enfrentarse. Yo he pasado por todos los niveles y por todas sus correspondientes fases. Quería comprobar y sentir de primera mano cómo es la verdadera realidad de estas personas, a qué barbaridades deben enfrentarse por huir de su país e intentar salvar sus vidas.

Una de las etapas ha sido enfrentarme a una batalla de preguntas realizadas por la policía. Debía medir bien mis respuestas porque si contestaba según mis propios criterios me pegaban. Tenía que contestar en función de lo que la policía quería escuchar, provocando así que rechazara mis derechos. Esta fase no era superada si mis respuestas se guiaban por mis criterios, por lo que estaba obligada a responder en contra de mis pensamientos.

En otra de las etapas simuladas, he tenido que meter mis objetos personales en una mochila en un espacio de tiempo reducido y escapar de mi casa y de la ciudad, pero tenía que burlar a los guardias que me impedían el paso con perros. Ha sido una de las fases que me ha causado mayor dificultad, ya que no tenía una salida clara y los guardias me acababan capturando. 

La última fase de este nivel consistía en salir del país y tenía que hacerlo eligiendo unos de los caminos que me marcaban. Después, para conseguir poder hacer el recorrido y conseguir mi objetivo, debía acatar decisiones para poder avanzar en mi camino. La primera decisión que tenía que tomar era seleccionar a un grupo de personas que no podrían realizar el viaje y quedarse en el camino. Me daban a elegir entre un grupo de familiares, amigos o vecinos. Otra determinación que tenía que coger era aceptar la tasa de pago que me reclamaba el conductor del vehículo y dependiendo de mi respuesta mi camino continuaba o no. En la mitad del viaje nos topamos con un control y uno de mis amigos no lleva la documentación para poder cruzar el país. Esto me obligó a decidir si continuaba o no el trayecto, o lo ocultaba y así poder continuar nuestro viaje.

En el siguiente nivel llego a un país nuevo y debo encontrar un sitio donde pasar la noche. Voy buscando hasta topar con alguien que acceda a ayudarme y así pasar la noche segura. Llego a un centro de acogida  para refugiados y debo buscar un traductor para que me pueda ayudar, pero tengo que darme prisa porque está a punto de marcharse y debo apresurarme y conseguirlo.

Se me presenta un caso donde hay siete personas que también han abandonado sus países por motivos varios y debo distinguir entre si esas personas son refugiadas o inmigrantes. En la última fase de este nivel me enfrento a mi primer día de clase en el nuevo país. Tengo que contestar a las preguntas que me realizan mi profesora y mis compañeros. A pesar de no saber el idioma bien, consigo adaptarme a esta nueva situación. 

Finalmente en el último nivel, comienzo mi nueva vida y en la primera fase tengo que encontrar un trabajo y elegir entre varias cartas de presentación para entregarlas, tener una entrevista de trabajo y conseguir el empleo. Debo seleccionar la ropa que voy a ponerme en la entrevista que posteriormente tendré. En la entrevista tengo que responder a unas preguntas y a pesar de poder aspirar a los dos puestos de trabajo, porque cuento con formación y preparación, me designan el puesto inferior.
Tras conseguir el empleo y tener mi primer sueldo necesito comprarme un teléfono móvil para poder comunicarme con mi familia y amigos. En el centro comercial, todas las personas con las que me encuentro ya sean clientes o los propios comerciantes me rechazan, me miran mal o hacen comentarios inapropiados sobre mí. Logro comprar el móvil, pero a la salida del centro comercial los guardias de seguridad me paran y me hacen enseñarle el contenido de mi mochila para ver qué es lo que llevo dentro. Verdaderamente piensan que lo he robado y tras asegurarse de que no es cierto, deciden que puedo continuar.

En la última fase con la que finaliza el juego, encuentro un apartamento y conozco a mis nuevos vecinos. En cada puerta me hacen una pregunta que simula las reacciones que tendrían estas personas al saber que tienen una vecina de un país diferente.

Considero que el juego tiene una dureza importante. Me ha parecido impactante como un videojuego puede llegar a recrear una realidad tan fuerte como es el caso de las personas refugiadas. He podido meterme de una forma directa y a través del juego en la piel de las personas que tienen que huir de sus países para salvar sus vidas y dejar atrás todo lo que tienen para poder así tener una mejor. 

Es injusto que estas personas deban pasar por este tipo de circunstancias extremas y que además deban enfrentarse a situaciones vejatorias en el país donde intentan empezar una nueva vida. 

¿Por qué los humanos somos a veces tan crueles? ¿Es realmente tan difícil ayudar a una persona que se encuentra en esta situación?

Mi cabeza no puede concebir por qué la raza humana es  tan despiadada y que no puedan ser capaces de ponerse en el lugar de las personas que por desgracia les ha tocado vivir esta situación.

Desde el primer momento que inicié la partida he sentido todo tipo de sentimientos. Comencé con sentimientos negativos como el miedo, el dolor, la angustia, el agobio, la tristeza, la impotencia, el enfado...Sobre todo, me he sentido frustrada por no poder haber ayudado a esa persona a la que simulaba.  A medida que el juego transcurría he podido sentir la verdadera realidad de esta situación: realmente todo lo mostrado en el juego es la vida real. Son tesituras con las que nos encontramos en la actualidad y que por desgracia ocurren como muestra el juego. 

La vida está completamente llena de prejuicios y malos comportamientos hacia personas que vienen de otros países. Existen pensamientos y conceptos totalmente inapropiados que muchas veces se tienen desde la ignorancia y el desconocimiento. 

Personalmente a mí el juego me ha hecho reflexionar y ponerme en el lugar de las personas refugiadas. Por ello considero que es una buenísima herramienta de trabajo para aplicarse en diferentes situaciones donde se den comportamientos de rechazo hacia personas que vienen de otros países. El juego muestra bastante dureza por lo que no se podría intervenir con niños pequeños, pero considero que puede ser muy útil trabajarlo con adolescentes, sobre todo en situaciones donde se vea un claro rechazo por personas de otros lugares. Yo lo utilizaría como material para reforzar valores positivos en ambientes donde existen valores completamente opuestos. Puede también emplearse como complemento en centros educativos donde haya personas refugiadas o que les haya tocado vivir posiciones similares, para que así puedan comprobar y sentir todo lo que significa encontrarse en una postura tan extrema y ponerse en la piel de los refugiados.

¿Qué pensáis vosotros de la situación de las personas refugiadas?

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